martes, 18 de mayo de 2010

DIARIO DE UN HIPOPÓTAMO


13 de septiembre
El tibio sol de la mañana, ilumina como cada día la gran charca donde me hallo inmerso. Esta mañana, no es como un día cualquiera, se oyen pasos y voces a mi alrededor…hay demasiado jolgorio que perturban mi tranquilidad.
Qué ocurrirá me pregunto una y otra vez, y no lejos de allí, escucho la respuesta.
-¡Hey, hipo, hoy tienes compañía! Son mis cuidadores, quienes me dan la noticia. Sí, y la veo, levanto mis ojos como si se tratase de un periscopio, pero ella ni siquiera se preocupa en mirarme.
14 de septiembre
El sol, el aire y mi corazón… arden en conocerla. Asomo mí cabeza por encima del agua, mis ojos se posan en su presencia, pero ella sigue sin mirarme.
Esta mañana, hice algo impropio en mí… sí, creo que me deje llevar por el entusiasmo…” he caminado sobre sus huellas”… no, no me preguntéis porqué lo hice. Aún no hallé la respuesta.
15 septiembre
Hemos tenido la visita de los niños de un instituto, uno de ellos en voz alta ha comentado que le tienen que buscar un nombre, que el zoo va a publicar un concurso, donde todos los niños podrán participar para buscarle un nombre. ¿Pero, tan difícil es?
Tristeza: Mírenle a los ojos, se oculta en un rincón y llora sus miedos.
Soledad: Se confunde con el reflejo, se mira en la charca y levanta su mirada hacia el Astro Rey.
Nostalgia, Melancolía o Ausencia, son unos pocos nombres que se pueden elegir para llamarla.
Su tristeza es marina… sí, tan profunda como el mar, su vaivén incesante borró sus pensamientos, sus imágenes y quedó sola frente al mundo...
Mi grito es una voz sin sonido, pero lo intento una y mil veces más.
Libertad: En aquel momento la bauticé con el nombre que se merecía.
16 septiembre
¿Estás sola o te sientes sola?
Pero ella ha hecho caso omiso a mi pregunta.
-Si nosotros no rompemos el hielo ¿quién lo va hacer? y he chapoteado en el agua, para que notase mis dimensiones… para que me mirase y supiese que estaba allí.
Sí y… se ha reído… y he pensado… a veces las mejores cosas las tenemos al alcance de la vista y no las vemos…

17 septiembre
Tú has vivido siempre aquí ¿verdad? No conoces los atardeceres en el Nilo, no conoces la compañía del aire ¡Tú… no conoces la vida! Fui traída a la fuerza y me pongo nerviosa cuando veo una puerta abierta. ¿No quieres venir conmigo? Me lo ha preguntado, y no he sabido contestarle, nunca sé que decirle.
Deséame suerte, dime Adiós, porque me iré.
18 septiembre
Cinco días solamente a su lado para darme cuenta de que aquí todos estamos de paso, hemos venido a nacer, aprender, crecer, amar y lo más importante… volver a casa.
Ambos echamos una mirada de soslayo a aquel agujero que hay en la alambrada posterior, hoy será uno de los días más emotivos, siento su cuerpo junto al mío y con paso lento nos alejamos, no tenemos miedo a nada, ni al fracaso, ni a la muerte, tenemos una oportunidad y vamos a aprovecharla.
Con paso decidido nos dirigimos hacia el camión que llevaba el nombre impreso “SAFARI PARK”, dicen por aquí que es lo más parecido a la libertad que buscamos.
Ella va delante, yo camino sobre sus huellas… ¿Por qué?… porque la quiero. Me he dado cuenta que el Amor, es subsidiario de La Libertad.

Querido diario: A todos nos late un profundo anhelo de libertad. Respetarla es la mejor forma de respetar nuestra propia naturaleza.
La libertad es el primero y más importante de los valores. Un mínimo problema de salud y se pierde libertad, un amor derivado en celos y minimizas esa libertad… nadie es libre, si no quieres serlo.
¿Y tú? Si no mires hacia los lados, ni hacia atrás, es a ti, que estás leyendo mi diario… ¿A qué estas aferrado? ¿Qué te impide volar? Piensa por un momento, qué significa “La Libertad”.

6 comentarios:

  1. ¡Buenoooo Rosi! Esto va subiendo el volumen considerablemente. ¡Qué pasada de relato! Lo he seguido casi sin respirar, sentada sobre el filo de la silla y llenándome de mil emociones diversas. Una mezcla explosiva entre la ternura, el asombro, el dolor por la falta de respeto de los seres humanos hacia los animales cuando ellos nos dan lecciones tan soberbias como la que tú pintas, decepción, dolor, anhelo, ansias de libertad, amor a la libertad,LIBERTAD COMO META... Y sí,he escuchado tu pregunta sin mirar hacia atrás ni hacia los lados, y me la he vuelto a preguntar por la millonésima vez. La libertad es la antorcha tras la que camino desde que era niña. Ella es la luz que vislumbro al final del tunel.
    ¡Gracias por este relato. Realmente me ha gustado muchísimo!.
    Un abrazo

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  2. ¡Muchasssssss Graciasssssss! Es una alegría ver que una reflexión de un momento, dice tantas cosas... ¿porqué el hipopótamo? porque estoy completamente segura que de tener abierta la puerta, sería el único animal que llegaría tarde...
    Invité a Maribel y tambien te invito a ti, al igual que Mar, a mi presentación del libro el día 11 de Junio a las siete de la tarde en la Biblioteca municipal de Móstoles. No tengo vuestros correos y no sabía como invitaros. Durante la tarde de hoy, he estado pensado en algo personal para Jorge, cuando lo tenga escrito os lo haré saber para que lo pongais en su blog.
    Un besito y de nuevo gracias, estos ánimos suben la moral.

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  3. Maribel dijo:

    Lucía: Es preciosa la historia del hipopótamo y las reflexiones a las que te ha llevado sobre sus estados de ánimo. Francamente original y demuestras una exquisita sensibilidad. Es cierto que los animales sienten. Lo unico que les falta es poder hablar, pero lo hacen con su mirada, con sus posturas, con su forma de estar, de andar... Todo un mundo de sentimientos que a veces los mortales no somos capaces de captar, pero tu lo has hecho de una forma bellísima.

    "Las mejores cosas las tenemos al alcance de la vista y no las vemos"... ¡Ciertísimo!...
    (..."Tú no conoces los atardeceres del Nilo ni al Astro Sol, ni conoces la vida!!!")

    ¡Que forma de captar los sentimientos de ese grandote y a la vez tierno animal.! Son infinitamente mejores que muchos humanos. A veces dudo, y pienso que deben de tener un alma, no como la nuestra pero algo parecido.

    De verdad Lucía. Ha sido un relato precioso.

    A proposito de esas personas con las que te cruzas en tu trabajo que dependen de las drogas, aconsejales que se compren el libro de Jorge a ver si se les quita las ganas de consumir.

    Me encantaría ir a la presentación de tu libro pero no sé si voy a estar en Madrid. Si estoy cuenta con mi presencia. Me encantaría conocerte en persona. De todas formas muchas gracias y te seguiré, pase lo que pase.

    Un abrazo querida y mucha suerte con todo.
    Maribel

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  4. Maribel dijo:

    Se me olvidaba darte las gracias por visitar el blog de Jorge.

    Besos

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  5. Gracias Maribel. Me ha encantado que hayas captado los sentimientos del único animal que creo que aún teniendo la puerta abierta, sería el que llegase el último... me sirvió como referente a buscar la libertad en mi novela corta y lo he querido reflejar aquí.
    Me encantaría contar con vuestra presencia, sin embargo soy consciente de que las obligaciones familiares y profesionales a veces se interponen en nuestras preferencias, así qué tranquilas. Pero si vaís si me gustaría que llevaseís un libro de Jorge, quiero tenerlo y si no despues ya buscaremos la manera de hacermelo llegar, pues sí quiero tenerlo y leerlo, es lo menos que puedo hacer por Jorge.
    Un besito y seguimos en contacto de alguna manera por aquí o en el blog de Jorge.
    Un beso.

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  6. Hola Rosi: ¡Gracias por invitarnos! Lo primero darte la enhorabuena. ¡Es guay que te hayan publicado el libro, que si no me equivoco ¿ya es el segundo? Yo, si puedo, y no tengo sesiones ese día por supuesto que iré, y si lo hago claro que te llevaré un libro de Jorge. De todas formas, por si no puedo, no tienes mas que encargarlo en Fnac, el Corte Inglés, La casa del libro, o en la propia Editorial Obelisco que te lo mandan incluso por internet.

    Me encantará que escribas algo sobre Jorge. ¡Lo pondré con muchísima ilusión y emoción!

    Un abrazo grande, amiga.

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